Sorpresas del ayer.

 
Hoy con una familia formada mas me doy cuenta que la vida es constante cambio, constante mejorarse a uno mismo y buscar que nada quede estático, sin crecimiento o evolución. Los errores del pasado no suelen quedar allá sino que suelen ser compañeros de transito por mucho tiempo y hoy gracias a Dios logro encontrar uno mas y poder trabajar en el. Muchas gracias por ese vestigio del pasado a mi yo que fui... 

Activando cuentas para video llamadas tan empleadas en esta etapa pandémica, me encontré con correos viejos que me recordaron como era mi vida hace 10 años y la verdad me tope con un tirón de orejas que hoy en día agradezco releer. Recordando todo lo que en aquel momento genero, teniendo en cuenta todo lo vivido hasta hoy veo que ciertos defectos los estoy empezando a pulir recién hace poco, descubro que los errores, defectos y malas costumbres solo los vemos cuando la situación global de nuestra vida y la madurez con la que uno la mira nos permiten dar cuenta de que existen y a partir de ese momento poder mejorarlos. 

Comentarios